Emiliano García fue ordenado sacerdote en la Catedral de San José
En la Basílica Catedral de San José, mediante la imposición de manos y la plegaria de ordenación de Mons. Fabián Antúnez SJ, obispo de la Diócesis de San José de Mayo, fue ordenado sacerdote para la iglesia que peregrina en San José y Flores, Emiliano García.
En las primeras Vísperas del XIX Domingo del Tiempo Durante el Año, sábado 12 de agosto de 2023, Mons. Fabián Antúnez SJ, Obispo de la Diócesis de San José de Mayo, presidió la celebración de la Santa Misa en la viviremos en la Basílica Catedral de San José la Ordenación sacerdotal de Emiliano García.
“A lo largo de la historia, Dios ha llamando a hombres y mujeres para una misión concreta y muchos han respondido generosamente transformándose en instrumentos del amor y la misericordia del Señor”, comenzó diciendo la guía de la celebración de Ordenación, la cual fue presidida por el Obispo de la Diócesis de San José de Mayo, Mons. Fabián Antúnez SJ y concelebrada por un numeroso grupo de sacerdotes, todos los sacerdotes de la Diócesis y muchos que han llegado de diferentes partes del país.
“Como familia diocesana celebramos y agradecemos hoy la vocación de Emiliano, que en esta eucaristía será ordenado presbítero para servir a la Iglesia que peregrina en San José y Flores”, invitaba al comienzo la guía de la celebración en la Catedral de San José
En la primera parte de la celebración, la Liturgia de la Palabra, varios laicos participaron de la proclamación de las lecturas de esta celebración: PRIMERA LECTURA (Lectura del primer libro de los Reyes 19, 9. 11-13a), SALMO Sal 84, 9-14, la SEGUNDA LECTURA, lectura de la segunda carta del apóstol san Pablo a los cristianos de Corinto 4, 1-2. 5-7 y el EVANGELIO según san Mateo 14, 22-33, que fue proclamado por el Diácono Federico De León, de la hermana Diócesis de Mercedes.
El Diácono Federico De León será ordenado sacerdote, junto a Luciano Retamosa en la Catedral de Mercedes el 24 de setiembre de 2023 a las 17:30 horas
Comenzando con los ritos de ritos de la Ordenación Presbiteral, se presentó el candidato a ser ordenado. En esta oportunidad, fue el Pbro. Gustavo Rebón, párroco de la Catedral de San José es quien presentó a quien va a ser ordenado sacerdote.
Ante el pedido, el candidato responde “aquí estoy” y el Obispo Antúnez concluyó con esta frase: “Con la ayuda de Dios y de nuestro Salvador Jesucristo, elegimos a este hermano nuestro para el Orden de los presbíteros”, a lo que continúa un breve canto y luego la Homilía
HOMILÍA
El obispo comienza agradeciendo la presencia de todos a la celebración: “Nos reunimos como ‘iglesia diocesana’ con el corazón agradecido a Dios por su misericordia, por su providencia y misteriosos caminos que han salido al encuentro de Emiliano en su vida y por el don de su docilidad al Espíritu, para decir que si al plan de Dios”
“Hoy una vez más mi corazón se maravilla frente a los caminos del Señor que nos sorprenden, que nos amplían horizontes y nos llevan siempre más allá de nuestras certezas y seguridades, con el corazón fiado de una promesa, como Abraham”, expresa el Obispo, refiriéndose a una de las instancia de diálogo con Emiliano en este tiempo.
Hablándole a Emiliano, Mons. Antúnez expresa “te invito a que tu corazón reconozca la inmensa fecundidad que se te fue confiada, soy consciente que tu historia está llena de nombres, rostros, historias, que te han hablado del amor del Padre y a los cuales te has entregado con empatía y compasión”.
“El Señor te concede la gracia del ministerio sacerdotal, como dice la segunda lectura como ‘un tesoro que lo recibimos en recipiente de barro’, en verdad Dios una vez te llama al sacerdocio desde tu vulnerabilidad amada por El, desde tus heridas curadas, desde una historia personal que se ha ido reconciliando a la luz del misterio del amor incondicional del Padre”, le dijo Mons. Fabián a Emiliano.
“Estos meses de diaconado han profundizado en ti la dimensión del servicio, al “estilo de Jesús”, desde abajo con su lógica del lavatorio de los pies”, expresa el Obispo y enumera cada uno de los servicios donde ha estado Emiliano en este tiempo.
“…junto a tantas personas han gozado de tu presencia cercana, afectuosa y consoladora, sigue cultivando esa pasión por el hermano, que te lleva a descubrirlo en los rostros de los más necesitados de la sociedad, como dice tu lema: “Cuanto hiciste a uno de estos hermanos más pequeños a mí me lo hiciste”.
Mons. Fabián invita a Emiliano a poder colocar toda su vida frente al Sagrario “Te invito, que sigas descubriendo el paso del Señor en su suave brisa, en el Espíritu Santo que te habla al fondo del corazón cuando vaciamos nuestras jornadas ante el sagrario”, “en el silencio de tu oración cargado de ‘rostros, nombres, historias’, donde presentarás ante El, nuestros límites, aquello que nos interpela, desborda o consuela”, señala Mons. Antúnez
El obispo lanza una nueva invitación “te invito a que imites al Señor que toma distancia para orar al Padre: “subió a la montaña para orar a solas… al atardecer todavía estaba allí… “.
“Sos una persona de acción, con liderazgo y energía para emprender cosas, en la capacidad que sigas cultivando de ‘tomar distancia’ de la realidad, para místicamente estar con Dios, descubrirás los pasos a transitar, los límites a aceptar y se irá integrando en tu interior el ”modo de proceder del Señor”.
Ese “estar con el Señor” te seguirá configurando el corazón de buen pastor, te permitirá caminar en medio de las olas de un “mundo líquido” donde en ocasiones resulta complejo el discernimiento de las decisiones a transitar.
Ante las realidades complejas del mundo, el obispo cita el pasaje del Evangelio que fue proclamado en la celebración “Fijo los ‘ojos en Jesús’ podrás caminar sobre las aguas sin hundirte, sin miedo a una realidad compleja pero donde sigue trabajando el Espíritu Santo”, lo anima el Obispo.
Haciendo referencia a su historia de vida, Mons. Fabián expresa que “tu barca, tu persona ha sabido navegar en otros tiempos en ‘medio de las noches oscuras’, de las pruebas de los sentidos, de la falta por momentos de la gratificación afectiva inmediata, sigue siendo fiel al discernimiento espiritual y continúa caminando fiado de una promesa que no defrauda”, señala
“En ocasiones tendrás que clamar al Señor “sálvame”: del ego personal, de emprender demasiado en nuestras acciones, de las seducciones de tumo, de la aparente falta de frutos”
“En un momento prometerás celebrar con “fidelidad y piadosamente” los misterios del Señor especialmente la Eucaristía y la reconciliación”, invita el obispo diocesano a Emiliano, pidiéndole que celebre estos dos grandes sacramentos reservados a los sacerdotes.
“Continúa imitando al Señor misericordioso, que no se cansó nunca en su vida de “perdonar” y luchar por la dignidad de toda persona humana”, concluye su reflexión el Obispo, a la vez que pide que “el Señor rico en tiempo quiera continuar mostrándoles el para qué de tu vocación”.
Concluida la homilía del Obispo, fueron las “promesas del elegido, las letanías de los santos y la imposición de manos”, ritos propios de la Ordenación sacerdotal.
La Imposición de las Manos y la Plegaria de Ordenación son los elementos esenciales de la Ordenación Sacerdotal, en ese momentos se invitó a los fieles a acompañar este momento en silencio y profunda oración. Comenzando con el Obispo y luego todos los sacerdotes presentes impusieron las manos.
Continuando con el ritual de la ordenación, Mons. Fabián Antúnez realizó la Plegaria de Ordenación.
Uno de los momentos emotivos en la celebración, fue el acercamiento de la estola y la casulla, por parte de Evelyne, la mamá de Emiliano y Camilo, su hermano.
IMPOSICIÓN DE LA ESTOLA Y LA CASULLA
Mientras acercan los ornamentos y durante la imposición de la estola y la casulla el coro entona el Salmo 109 “Tu eres Sacerdote para siempre”. Quienes impusieron los ornamentos propios del sacerdote, fue el P. Paolo Rocca y el P. Giuseppe Calderone omi, quienes revistieron a Emiliano.
OFRENDAS
En la presentación de las ofrendas, acercó el Santo Crisma (que fue bendecido en la pasada misa crismal) por el Diácono de la Diócesis de Salto Rodrigo Barboza, el pan y el vino el joven matrimonio de Felipe Chávez y Florencia Dutruel.
Con el Santo Crisma, el Obispo diocesano ungió las manos de Emiliano y le entregó el pan y el vino, uno de los sacramentos que está reservado a los sacerdotes, de ofrecer el sacrificio de la Eucaristía. Luego de estos gestos, el Obispo se levantó y realizó el saludo de paz con el nuevo sacerdote.
Luego continúo la Eucaristía.
ACCIÓN DE GRACIAS P. EMILIANO
“Bueno, voy a intentar decir unas palabras entre un poco la emoción y el resfrío que tengo hace un par de días, se puede dificultar un poquito, pero lo primero obviamente es darle gracias a Dios, en la persona de Fabián, de mis hermanos de comunidad, Gustavo, Andrés, yo le digo Andresito, que sin lugar a duda lleva mucho trabajo y mucho amor preparar todo esto, yo le agradezco de corazón porque para mí son hermanos y lo han hecho esto con mucho cariño.
También quiero agradecer a mi familia de sangre que están casi todos aquí presentes y a mi familia de corazón que son todos ustedes y es la Iglesia también. Así que agradecerles ya la lista la hice la vez pasada. Me olvidé de agradecer a la Facultad de Teología, a la capilla de Ismael Cortinas, al hogar de niños Juan XXIII y a la gente del barrio Unidos que vino de Montevideo. Les agradezco de mucho corazón este enorme esfuerzo en venir.
Entonces un poquito en esta línea, me llegaba mucho rezando estos días la frase de San Pablo que dice somos un cuerpo. Somos un cuerpo. Y cada vez que uno de los miembros recibe un don, no lo recibe una parte del cuerpo, lo recibimos todos. Si alguien llega a ordenarse sacerdote es gracias a un montón de personas que Dios te va poniendo en el camino. ¿Y también a veces yo me pregunto cuál es la pregunta más fundamental de la vida? Y una vez escuché una pregunta que me convenció, que dice ¿Por qué me levanto hoy? Entonces, lo que le pido a Dios es primero, la gracia de tener siempre rostros concretos que son la motivación para levantarme cada día para poder dar lo mejor de mí. Aunque consciente de que, como dice San Pablo, llevamos un tesoro en vasijas de barro.
Por eso les pido la oración, el cariño y también la amistad, el trabajar juntos en esto de la evangelización. Y les quiero agradecer también porque al igual que San Pedro, cuando se vienen las tormentas, muchas veces el rostro de Cristo al cual uno le dice ‘Sálvame’, dame una mano que me hundo, es el rostro de ustedes. Sí, este, por lo menos en la experiencia mía, la experiencia de la vida cristiana, la experiencia del Seminario sin mis hermanos seminaristas también no podría estar acá, literalmente. La experiencia de estar con los compañeros y con la gente de la comunidad.
El rostro de Jesús que uno a veces le dice Sálvame es el rostro de ustedes. Ese es el rostro que uno ve. Así que bueno, yo les agradezco de corazón. Quiero recordar especialmente hoy a mi papá, que falleció hace un año, que imagino que debe estar contento.
También a mi padrino de confirmación que se murió este año, Teo Stracke, compañero del coro de la Casa de la Cultura, que sin él no tendría la fe hoy no estaría hoy acá hablando, así que te agradezco de corazón y también al padre Guido Danelón, que fue el cura, el cura párroco de mi infancia, que hace unos pocos días tuve la gracia de poder estar en la misa de cuerpo presente, del cual también él nos da todos los sacerdotes un testimonio de entrega en favor de los más pequeños. Así que bueno, también un aplauso para él.
Muchas gracias. Que Dios los bendiga. Bueno, pasamos ahora después a la parte más tica del compartir. Espero con algunos compartir después alguna otra cosa un poco más sustanciosa que unas empanadas, con algo más de proteína. Y bueno, que Dios los bendiga y nos confiamos al Sagrado Corazón de Jesús, que de Él nace todo el amor. Sagrado Corazón de Jesús, en vos confío”.
Terminada la celebración se compartió un brindis en el Hogar Católico.
homilia-ordenacion-sacerdotal-Emiliano_12-8-2023Acción de gracias P. Emiliano (Gentileza LA TUBA)