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Camino sinodal: síntesis diocesana

INTRODUCCIÓN
Este camino pre sinodal en la diócesis quisimos que fuera la oportunidad de potenciar nuestra vida comunitaria   y vivirlo en primer lugar haciendo la experiencia de “caminar juntos” y posteriormente reflexionando sobre ella

Síntesis Relectura de la experiencia Sinodal
Esta síntesis procura compartir los principales frutos del discernimiento de todo el Pueblo de Dios de la Diócesis

Etapas del camino diocesano

Experiencia de vivir la sinodalidad en una mirada contemplativa de la realidad diocesana
En conformidad con la invitación a integrar el Proceso sinodal en la vida de la Iglesia local debemos señalar que esta propuesta llega en un momento de transición de nuestra diócesis con la asunción del nuevo obispo Mons. Fabián Antúnez-Percíncula el  22 de agosto de 2021. En ese momento varias comunidades parroquiales estaban participando activamente de la Asamblea Eclesial Latinoamericana, la que en sí misma fue un importante ejercicio de sinodalidad. Mons. Fabián nos invita a mirar nuestra diócesis con esa mirada contemplativa de la que nos habla el Papa Francisco en Evangelii gaudium (N.º 7).

En reunión de presbiterio del miércoles 13 de octubre de 2021 se trabajó con una dinámica participativa un primer acercamiento a la realidad diocesana.  El sábado siguiente se realizó el un Encuentro Diocesano, con una acentuación diocesana, utilizando la misma dinámica.

ENCUENTRO DIOCESANO 2021

El sábado 16 de octubre en el Gimnasio del Colegio Sagrada familia se reúne una Asamblea Diocesana convocada por el Obispo Mons. Fabián Antúnez con motivo de iniciar el Sínodo en su fase diocesana. Participan 89 fieles representantes de las distintas comunidades parroquiales: laicos, religiosas, sacerdotes.

El obispo da la bienvenida a todos los participantes y los anima a participar de este tiempo particular de discernimiento eclesial.

El Pbro. Federico Bragonzzi explica la convocatoria del Papa a participar  del Sínodo y sus distintas etapas.

El Pbro. Nelson González propone la dinámica de trabajar por áreas temáticas:

Mirada contemplativa de la vida diocesana

  • Primer anuncio e iniciación cristiana
  • Pastoral Juvenil
  • La vida de las comunidades parroquiales
  • Las pequeñas comunidades (CEBs)

La pastoral social

  • La comunidad presbiteral (esta dimensión se abordó en la Reunión de presbiterio)
  • En cada una de las dimensiones de buscó compartir:

FRUTOS (Qué ya tenemos como logros o que deseamos)

 IDEAS PARA CRECER (Qué nos ayuden a ir a más en esta dimensión)

 HERRAMIENTAS (Qué nos ayuden a caminar)

 MI COMPROMISO (Cada participante comparte lo qué está dispuesto a dar de sí para crecer como comunidad)

II ETAPA: Vivir la sinodalidad en una mirada contemplativa en las comunidades parroquiales

Con una metodología similar, desde octubre a diciembre de 2021 trabajaron las comunidades parroquiales. La Vicaría Pastoral elaboró un subsidio a modo de guía de trabajo.  En cada Parroquia se lo trabajó en los distintos grupos, servicios y pequeñas comunidades. En varias comunidades se realizaron Asambleas Parroquiales.

Algunos elementos que aparecen en esta etapa:

En algunas comunidades aparece como fortaleza el sentido de pertenencia parroquial y la participación en la vida comunitaria. Otras están todavía afectadas por la disgregación que provocó la pandemia y las del área metropolitana se viven como tierra de misión. Se señalan las diferentes realidades frente a la emergencia sanitaria, en algunas comunidades cuesta mucho recuperar la participación. Otras la vivieron como espacio de creatividad y de mantener vínculos utilizando las redes. Estas experiencias vinieron para quedarse.

Se valoran los encuentros como lugares de crecimiento comunitario, de conocimiento de los miembros, de fraternidad, de gratuidad y de celebración.

Se valoran los ministerios laicales y el trabajo de la catequesis parroquial, tanto de niños como de adultos. la fraternidad se vive como una fortaleza parroquial y se destacan las obras sociales que se han potenciado en torno a la pandemia.

Se valora de gran manera la diversidad de ministerios laicales tales como ministros de la esperanza, de los enfermos y la comunión fuera de la misa, acólitos y ministros de la animación litúrgica. Se resalta que en todos los ministerios hay participación tanto de varones como de mujeres.

En la recientemente creada parroquia de Delta del Tigre que abarca cuatro barrios periféricos con cinco capillas, se está viviendo una etapa de estabilización, también por la presencia de dos presbíteros a tiempo completo. Actualmente tienen actividad tres pequeñas Comunidades alrededor de la capilla del Delta, de San Fernando y de Villa Rives (muy reciente). Desde el punto de vista sinodal no se pudo lograr en el pasado la consciencia de un “caminar juntos” en sentido parroquial. Se desarrolló más bien la autonomía de cada Comunidad. Hoy se está caminando hacia la experiencia de ser una sola parroquia, aun favoreciendo la dinámica de cada pequeña Comunidad. La propuesta del Sínodo gustó y la trabajaron en diferentes asambleas parroquiales, llegando a la decisión de mantener estas reuniones por lo menos una vez al mes, para seguir hablando del caminar de la parroquia

3er etapa: Vivir la sinodalidad  en  escucha y diálogo con  el  entorno

De marzo a mayo de 2022  cada comunidad buscó la manera de vivir el proceso como “Iglesia en salida”. Dada la diversidad de situaciones, en esta etapa hubo mucha creatividad en las  formas de llevarla adelante, desde encuestas callejeras, pedidos de aportes a  personas   referentes de la zona, a  grupos de la sociedad civil, etc. Se han generado espacios de escucha y diálogo con personas que han vivido experiencias fuertes eclesiales, pero que hoy no se encuentran integradas en sus comunidades.  Este proceso de consulta está siendo una excelente oportunidad para crear nuevos espacios de relación o mejorar los que están en estado incipiente o informal. El abandono de la práctica religiosa acontece como “algo fisiológico” por falta de trasmisión de la fe en la familia, ignorancia religiosa, ritmos de trabajo, falta de estímulos…

Se está difundiendo también una cultura New Age, con formas de agnosticismo hacia la fe cristiana y búsqueda de experiencias interiores de tipo meditativo, energético, cósmico. Desafío cultural: muchas personas se bloquean por no entender el lenguaje de la Iglesia y no tener respuestas que puedan aclarar las dudas que vienen de una mentalidad laica y “científica”. Es común encontrar posturas tipo: “Jesús sí, la Iglesia no”;

Algunas entrevistas significativas:

  • Personas que recuerdan con nostalgia lo positivo que fue en sus vidas la experiencia de Iglesia, pero que por distintas razones (crisis comunitarias, cambios de párrocos, situaciones personales) hoy no participan activamente, aunque todavía se sienten “simpatizantes”
  • Personas evangélicas: Dejaron de participar por falta de tiempo (“Dios no me da de comer”) y porque en la Iglesia te van agarrando de a poco. La misa es muy aburrida y la oración católica muy estructurada. El culto evangélico es más alegre y facilita más participación (música, alabanza).Los curas mandan, hacen son “mandones”. La Iglesia católica es más para los ricos. En los sectores populares y pobres se meten más los evangélicos. Importancia de la Palabra y del conocimiento de la Biblia.
  • Joven católico de 17 años: No está en contra. Dejó de participar porque los domingos los tiene ocupados con el fútbol.  Aprecia lo que hace la Iglesia católica y también el Estado tendría que reconocerlo y ayudar. Las homilías son muy extensas y no logran interesar a los que escuchan.
  • Señora católica que no participa: Mal recuerdo de la educación católica recibida en la infancia y adolescencia (colegio católico). Evangelización opresiva, obligación a confesarse. A veces los católicos dan la impresión de que se sienten dueños de la verdad; y hay personas que dan mal testimonio (“comen santos…).
  • Otras/os: Los católicos no visitan, están encerrados en su comunidades. Poca confianza en la Iglesia, también por los escándalos.

II Encuentro Diocesano Sinodal (Miércoles santo 2022)

Esta segunda instancia de convocatoria diocesana  comenzó con una meditación guiada por nuestro obispo: “La lógica de la compasión”

El tesoro escondido “La Iglesia no es un problema a resolver, es un misterio a vivir”

En un segundo momento se trabajó en grupos generando un espacio de reflexión sobre nuestras experiencias de caminar juntos (sinodalidad). Para ello se utilizó la metodología de la Indagación apreciativa. Se trata de un proceso que involucra a los participantes en el intento de descubrir qué es lo que funciona bien para potenciarlo, lograr la renovación y mejorar el desempeño En lugar de obsesionarse en el intento de mejorar las debilidades y encontrar culpables, la indagación apreciativa se centra en cómo crear más ocasiones de desempeño excepcional a partir de las fortalezas existentes.  Una visión conjunta de lo que ya se hace bien genera una visión colectiva del potencial futuro de la comunidad. Esta imagen en positivo guía el camino de superación y crecimiento. 

En la Iglesia sinodal que anuncia el Evangelio, todos “caminan juntos”

LA PREGUNTA FUNDAMENTAL

¿Cómo se realiza hoy este “caminar juntos! En la propia Iglesia particular? ¿Qué pasos nos invita a dar el Espíritu en nuestro caminar juntos?  (PD 26)

PRIMER PASO: Nuestras experiencias significativas

Recordar algunas experiencias vividas en nuestra comunidad en las que experimentamos “un caminar juntos” significativo. Los participantes comparten alguna experiencia  de sinodalidad que hayan vivido en sus parroquias.

  • Consejo Pastoral y Consejo Económico existen en las parroquias más grandes, en las más pequeñas se generan espacios de participación menos estructurados.
  • Ministros laicos tienen un largo camino recorrido en la diócesis y son muy valorados.
  • Que todas las comunidades podamos trabajar juntos
  • Se está venciendo el miedo de la pandemia. Estamos empezando de nuevo y hay buena voluntad. El deseo que podamos vivir la solidaridad acompañando más personalmente la situaciones (de persona a persona)
  • Un fruto es una cercanía solidaria de la gente, no organizada, un poco espontánea Que indica esta sensibilidad creciente  Y como deseo que cada persona que participe en la comunidad busque contactos, trate de establecer vínculos  con otras personas, con vecinos o familiares en vista a crear pequeñas comunidades.
  • El uso de la tecnología ha ayudado a mantener la comunicación e incluso a  fortalecer  grupos.
  • Acompañar la presencia de Dios y descubrirla allí donde estemos.
  • Diferentes personas de la Parroquia participaron en una fiesta de la ciudad.
  • Organización de los 110 años de la Capilla con participación y colaboración de muchas personas.
  • Ayuda para gente muy necesitada promovida por la Parroquia.
  • Monumento a la mujer rural con participación de personas de la zona.
  • Recorrida por el barrio con los niños.
  • Tiempo de escucha con los enfermos y ancianos.
  • Experiencia de catequesis rural
  • Acompañamiento a personas privadas de libertad (Pastoral penitenciaria)
  • Experiencia de misión y de desayuno con niños y demás personas del barrio.
  • Experiencia de acompañamiento de vida a familias
  • Experiencia en talleres de Biblia
  • La  secretaria parroquial como lugar de acogida y escucha
  • Experiencia de acompañamiento espiritual a  paciente terminal
  • Olla solidaria en comunidad  barrial
  • Unión entre laicos y religiosas en la gestión educativa
  • Misas de Navidad en zonas rurales
  • Iniciativa de monumento a la mujer rural (en Rafael Peraza)
  • Misión en Ismael Cortinas, recorriendo todos los vecinos y viendo las necesidades
  • Grupo Renacer de ayuda mutua padres que perdieron hijos

Nos preguntamos:

¿Con quienes hemos compartido la experiencia de ser “compañeros de viaje?

  • Comunidades de otras Parroquias y Colegios, Hogares de Ancianos
  • Experiencia de Iglesia Doméstica y pequeñas comunidades que se vinculan en el barrio.
  • Grupos misioneros.
  • Chicos de la catequesis, familias.
  • Vicentinos.
  • Actividades intergeneracionales jóvenes y adultos y  entre niños y ancianos (Hogares)
  • Instituciones de la localidad: alcaldía, comisión barrial, club de fútbol, organizaciones de servicio
  • Trabajadora social, psicóloga,
  • Vecinos que ofrecen espacio para dar catequesis (ejemplo almacén de campaña)
  • Vecinos y familias de la zona rural
  • Instituciones educativas
  • Personas de diferente creencia religiosa

¿Cuáles son nuestras fortalezas en la actitud de escucha? ¿A quiénes hemos invitado a “tomar la palabra” ¿Qué experiencias tenemos de diálogo y de acción con la sociedad en la que estamos y con sus diversos grupos e instituciones?

  • Son actitudes fundamentales la escucha y el diálogo
  • Se destaca la falta de escucha que experimentan de manera especial  enfermos y ancianos. Los hace sentir importantes y es en sí una “buena noticia”
  • Tiene lugar la escucha de manera respetuosa.
  • Se comentan situaciones de diálogo con otras comunidades.
  • Experiencia de escuchar a todos pidiendo opinión
  • La capacidad de diálogo, promoviendo la tolerancia
  • La escucha supone un proceso de aprendizaje.
  • Todos aportan ideas y colaboración
  • Todos se sienten protagonistas
  • Favorece la inclusión y el involucrarse en las obras y proyectos
  • Reconocimiento de cómo Dios va conduciendo a cada uno a su modo y a su tiempo

Los catequistas muchas veces cumplen un rol clave en le escucha y contención de  los  niños especialmente en situaciones de vulnerabilidad, violencia familiar, …

  • Los vínculos nos  humanizan
  • Las comunidades que elaboraron encuestas para quienes no participan valoran la importancia de escuchar las diferentes realidades.

SEGUNDO PASO: El tesoro que ellas encierran

¿Qué descubrimos como un tesoro en nuestra experiencia? Hacemos en grupo un listado de las fortalezas que encontramos en nuestra vida comunitaria.

  • Descubrir una familia que camina junta, que ante un tropiezo busca una solución apoyándose en la misericordia de Dios
  • Compartir experiencias positivas para valorar y reafirmar nuestro caminar juntos siguiendo a Jesús
  • El Espíritu Santo actúa. Se reconoce la creatividad de Dios
  • Iglesia se haya sostenida por gente sencilla y  que no hace ruido y sostiene la fe
  • Fidelidad
  • Alegría de compartir juntos
  • Anuncio de Dios promoviendo la conversión y un proceso de fe
  • Fraternidad, solidaridad, servicio
  • Solidaridad, diálogo, don  de escucha, comprensión
  • Respeto, tolerancia, oración comunitaria
  • Acompañamiento, el interés el uno por el otro
  • Constancia, perseverancia
  • Ayudar /actitud de servicio
  • Estar con ellos / acompañar
  • Salir al encuentro
  • Pertenencia
  • Amor
  • Crecimiento
  • Trabajar juntos y ver los frutos
  • Fortaleza
  • Creatividad

TERCER PASO: La invitación del Espíritu Santo

¿Qué pasos nos sentimos invitados para que crezca en medio nuestro este espíritu de caminar juntos? ¿A quiénes podríamos invitar? ¿Qué aprendizajes necesitamos realizar?

Abiertos de los cambios, buscar otros caminos

En salida al encuentro, sin juzgar. Al encuentro de la “vida como viene”

Seguimiento a personas nuevas en las comunidades parroquiales

Enfocarse en lo bueno, en lo que Dios ya está obrando en cada persona o grupo humano.

Retomar la visita a personas, Estar más presentes. Ir a las casas.

Anuncio del Evangelio como respuesta a las necesidades más profundas.

Salir al encuentro de TODOS los jóvenes Especialmente los que no ven el sentido de la vida 

Abrazar y aceptar al joven como viene y como es.

Fortalecimiento de la Pastoral de los Colegios   

Mayor compromiso en la participación.

Reavivar  la experiencia de las CEBs .  que volver a proponerlas

Ser más sinodal escuchando y caminando con los demás

Más trabajo comunitario en red aprovechando riqueza de las diferentes comunidades,

Tender puentes. Salir de “la chacra”.

Dejar entrar el Espíritu Santo y ayudar a que los demás tengan un espacio.

Fomentar más el Consejo Parroquial y Económico en las Parroquias

 


CONCLUSIÓN
llamados a caminar juntos

Lo vivido en este camino pre sinodal ha despertado un fuerte llamado:

>> a caminar juntos,

>> a vivir la “conversión pastoral” de la escucha y la apertura al diálogo,

>> a enfocar el anuncio evangélico como respuesta a las necesidades más profundas de las personas superando actitudes de proselitismo religioso. 

>> a vivir la dimensión comunitaria de la fe en pequeñas comunidades y

>> a caminar con hombres y mujeres de buena voluntad y   crecer en la articulación con las distintas organizaciones de la sociedad civil.