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Revestimiento de la cúpula concluye los trabajos de esta etapa

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En estos días ha comenzado a recubrirse la cúpula principal de la Basílica Catedral de San José, etapa prevista dentro del plan de obras de restauración del templo.

El responsable de la empresa Santa María que lleva adelante la obra Ing. José Zorrilla ha estado en varias oportunidades en San José y en los últimos días ha conversado con algunos medios de comunicación de la capital departamental sobre los avances de la obra. La misma se concreta gracias al aporte local de la campaña, que aún sigue abierta, “Nuestra Catedral, compromiso de todos”, el convenio con el Ministerio de Transporte y Obras Públicas (MTOP) y el Gobierno Departamental de San José.

El Ing. Zorrilla comentó el proceso de restauración que se ha desarrollado en este último año en la Catedral, el cual tenía como uno de los objetivos poder preservar los frescos del pintor italiano Lino Dinetto que se encuentran en su interior y mejorar las condiciones de impermeabilización de las cúpulas, eliminando las humedades y reforzándolas estructuralmente de las tres cúpulas, la mayor, la de la capilla del Santísimo y la del baptisterio. Además de la colocación de vidrios, se han puesto mallas galvanizadas en las ventanas, reparado vitrales, mejorado las humedades de las columnas de la fachada y el revestimiento de las paredes del atrio de entrada al templo.

Zorrilla comentó que “las obras que se están haciendo tienen la finalidad de durar unos 100 años más”. En la cúpula principal, con la ayuda de andamios, se realizó “una estructura de piel de hormigón proyectado, como si se tratara de una segunda caparazón alrededor de cúpula y un mortero impermeabilizante elástico de última tecnología”, destacó.

Nuevos azulejos
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Respecto de los azulejos que recubrían la cúpula principal y los nuevos que se están colocando, el Ingeniero Zorrilla valoró el trabajo de los constructores catalanes de esta Catedral, que al igual que otros edificio en el Uruguay “dejaron demostrado que para la época y los recursos con los que contaban eran unos verdaderos maestros”.

“Los ‘pal de calais’ que recubrían la cúpula mayor, tenían más de 100 años de colocados, el deterioro provocado por la humedad y las inclemencias del tiempo habían hecho que muchos de ellos se hayan degradado y perdido el color original”, indicó el Ing. Zorrilla.

Ya en la década del ’50 (por encargo de Mons. Di Martino) se reparó la cúpula y se retiraron los pal de calais, pero se volvieron a colocar con arena y portland, “lo que hizo imposible poder reutilizarlos, aunque los hemos quitado con delicadeza y el mayor de los cuidados, ya que forman parte de la historia de San José y de este templo”, dijo Zorrilla.

Luego de varias averiguaciones en fábricas que se especializan en la confección de este tipo de porcelanatos, se optó por una razón de tiempo y costos por una industria brasilera. “Averiguamos en las fábricas en el norte de Francia, donde se habían fabricado los pal de calis originales, ellos siguen haciéndolos con la técnica de pintando a mano y valen mucho dinero por su artesanal trabajo”, contó Zorrilla, además dijo que “respecto de la cantidad que nosotros precisábamos llevaría alrededor de 2 años en hacerlos más el tiempo de envío, lo cual se tornaba inviable”, dijo.

“En China encontramos que se fabricaban piezas parecidas, en porcelana, pero los tiempos y costos estaban fuera de nuestro alcance. A nivel local en Uruguay hay cerámicas artesanales pero muy costosas, en Argentina se fabrican pero no en los colores que precisábamos”, comentó el ingeniero. Finalmente fue en una fábrica de ladrillos en Brasil “SANTA” que se especializa en azulejos en porcelana, y revestimientos para Iglesias que se encuentra en la Fazenda Santa Gertrudes, de la ciudad de San Pablo, la cual reproduce azulejos de estilo portugués en blanco y azul como los que se requerían para la cúpula. “Respecto de estos porcelanatos es de destacar la impermeabilidad que tienen, menos de 0,5 % de absorción de agua contra un 6 u 8 % de los anteriores pal de calais, es decir que duran 3 o 4 veces más que los otros”, indicó Zorrilla. Los actuales azulejos se están colocando en forma circular alrededor de la cúpula y sellados con un adhesivo especial para la colocación de cerámicas de baja absorción de la marca SIKA.

Al final de sus comentarios sobre el proceso que ha llevado la obra, el Ing. José Zorrilla destacó el trabajo que se ha realizado en la cúpula del Santísimo y del Baptisterio, una sobre calle 25 de mayo y la otra sobre Treinta y Tres. “Se le ha colocado una membrana impermeabilizante de última generación y una capa de poliuretano de larga vida, así como también una malla de fibra de vidrio con un tinte de color gris que se le ha dado, para uniformizar, lo más posible, a la estructura antigua”, indicó.

Durante este tiempo subrayó Zorrilla “ha sido fundamental el trabajo de cerca y de referencia de Mons. Arturo y del Arquitecto Carlos Diana”, remarcó. La obra se concluirá a fines de febrero o comienzos de marzo.