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60 años de la creación de la Diócesis de San José en Uruguay

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El 15 de noviembre pero del año 1955, el Papa Pío XII creaba nuestra Diócesis de San José de Mayo, o como la llamó en el documento, la Diócesis de San José del Uruguay.

Celebramos el 60º aniversario de ese importante acontecimiento. El seminarista Andrés Paredes, ha pedido del Obispo diocesano, ha investigado y conseguido los textos de los documentos referidos a él, especialmente la Bula de creación o erección de la Diócesis. La misma se denomina “Constitutio accepta arcano dei concilio”, y su texto original en latín.

De los documentos se desprende la creación de dos nuevas Diócesis en el Uruguay, la de Melo y la de San José de Mayo, al separarlas de la Arquidiócesis de Montevideo.

Se separan de la Arquidiócesis los departamentos de San José de Mayo y Canelones, a excepción de las poblaciones de Joaquín Suárez, Sauce y Pando y de la Diócesis de Salto se desunió el departamento de Colonia.

Pide además que la nueva Diócesis se dedique a San José, esposo de la Virgen María.

“Con todos estos territorios erigimos otra Diócesis que se denominará San José del Uruguay, cuya Sede establecemos en la ciudad de San José de Mayo, y cuya Iglesia Catedral será la que está dedicada a San José esposo de la Bienaventurada Virgen María, otorgándole todos los derechos, honores y privilegios inherentes a la dignidad a que ha sido elevada”.

Asimismo, el Documento papal del Papa Pío XII determina que los Obispos de ambas nuevas Diócesis “sean revestidos de los mismos derechos, facultades y prerrogativas de que gozan los demás Obispos de la tierra, así como también las mismas obligaciones”.

La bula del Papa, la cual fue enviada al entonces Nuncio Apostólico, representante del Pontífice en el Uruguay, Mons. Alfredo Pacini, pide particularmente por las vocaciones sacerdotales, a aquellos que “por la voz de Cristo son invitados a los suavísimos oficios de sacerdocio”, los cuales sean “cultivadas con toda diligencia”, pide el Papa.

Además solicita que se cree un “Capítulo de canónigos”, una especie de consejo o consultores para avanzar en la creación de la nueva jurisdicción eclesiástica.

El mismo Pontífice Pío XII (Eugenio Pacelli) elegido Pontífice el 2 de marzo de 1939 hasta el 9 de octubre de 1958, falleció en la Residencia de Castelgandolfo donde firmó la Bula de Creación de la nueva Diócesis de San José en el Uruguay en 1955, 17 de su Pontificado que duró 19 años.

Hacia finales del mismo año 1955, el Papa Pío XII, escoge y nombra como primer Obispo de la nueva Diócesis a Luis Baccino, el cual recuerda que fue Vicario General de la Arquidiócesis de Montevideo y actuó como cura de la Parroquia Nuestra Señora del Carmen (Aguada) y canónigo. El Romano Pontífice pide a los files de la Diócesis de San José que “respondan con igual amor los afanes del nuevo Obispo, además de obedecerlo y aceptar sus consejos”.

El nombramiento fue dado a conocer el 20 de diciembre de 1955 y 8 de abril de 1956 toma posesión del nueva sede. En el mismo documento el Papa nombra a Mons. José María Cavallero como Obispo de Melo, a su vez, el Arzobispo de Montevideo de entonces, Antonio María Barbieri, quien luego fue el primer Cardenal uruguayo, envía una “Exhortación pastoral”, mencionando algunos aspectos de la toma de posesión de los nuevos Obispos.


Toma posesión de Mons. Luis Baccino de la nueva Diócesis de San José (8 de abril del año 1956)